Estás entrando en otra dimensión... Una dimensión no sólo visual y sonora, sino también de mal aliento, depósitos de gasolina vacíos, rosas marchitas y cenas románticas en Mickey D's. Cuando Serenity salió de su casa, abrió un portal a un mundo muy extraño y muy equivocado; un plano paralelo que se parecía al suyo, pero en el que la razón y la lógica se han convertido en el remate de alguna broma cruel... y en el que el tiempo se arrastra... ¡las citas son horribles pero, por otro lado, el sexo es jodidamente fenomenal!
No tiene muy buenos modales y parece que no le gustan las mujeres a causa de su divorcio, pero fue con él con quien acabó Serenity en esta cita infernal, y aun así no le impidió que se lo metiera en la boca. ¡Es un ángel del infierno!
Leeanna Heart se ama a sí misma más que a nadie. Cuando folles con ella, puede que la sorprendas mirándose al espejo, como preguntándose de qué color debe pintarse las uñas mañana. Ese tipo de vanidad también la convierte en una cita infernal.
Serenity ha vuelto y esta vez Ian Daniels es el siguiente en clavársela. Lleva tres meses sin lavarse los dientes y cree que ése es su problema. Consigue que le coma el coño y perciba el dulce aroma de su coño, ¡porque así de buena es ella!
Follar en coche siempre parece una buena idea cuando se empieza, pero suele dejar a alguien magullado, sobre todo cuando ambas personas miden casi dos metros. Aquí Johnni Black y Wilde Oscar van a por todas y se meten la polla dentro de ella mientras comparten el espacio reducido de la limusina.
Mandi Frost no encuentra atractivos a los hombres peludos... sin embargo, en este clip aún se las arregla para encontrar a un hombre arisco con la polla hasta las pelotas dentro de ella. Parece que una vez que la invitas a cenar se siente culpable de que un hombre se vaya a casa con las bolas azules.
Tras una serie de Citas del Infierno, Serenity y Johnni Black deciden quedarse en casa en lugar de salir en otra mala. Descubren que follar entre ellas es lo que deberían haber estado haciendo todo el tiempo, ¡y esta cita sexy es la primera de muchas más!